Echar la sal es uno de los momentos más críticos al cocinar nuestros platos, ya que de ella depende que nuestro plato esté comestible o las personas hagan caras amargas al probarlo.
Aunque parezca fácil, encontrar las medidas justas es complicado y requiere tiempo y paciencia conocer qué cantidad exacta de sal necesita cada plato.
Si has entrado en este blog es porque buscas de manera desesperada una respuesta al titular o te ha pasado y no quieres que vuelva a ocurrir. Sea por lo que sea, a continuación, se mostrarán las claves para que no te pase o no te vuelva a pasar.
¡A tu paella aún le queda esperanza de vida!
¿CÓMO ARREGLO MI PAELLA?
Antes de echar el arroz
Tal vez te hayas dado cuenta al probar el caldo por primera vez y, por suerte, aún no has echado el arroz.
Por ello, debes coger un recipiente que sea hondo en el que aún queda caldo y una paleta de las que se utilizan para servir caldos. Cuando lo tengas todo a mano, debes sacar parte del caldo y verterlo sobre el recipiente.
Depende del punto de sal
Y es que no es lo mismo que la paella esté muy salada o solo un poco porque si no lo está mucho, debes sacar menor cantidad.
Después de haber realizado esto pasos, es la hora de sustituir la cantidad del caldo que has sacado por agua nueva para que hierva junto al resto del caldo antes de volcar el arroz.
Puede que después de realizar estos pasos, hayas conseguido corregir la cantidad de sal que te atormentaba, pero, tu paella no estará tan sabrosa como antes.
Si ya había echado el arroz
Sentimos decirte que es tarde para arreglarlo porque el caldo utilizado para cocinar el arroz está medido y no se le puede quitar en este punto y cambiarlo por agua como se ha explicado anteriormente. Si se hace, la paella carecería de sabor.
Sin embargo, es importante que sepas cómo medir la sal de tu paella la próxima vez para ahorrarte disgustos y agobios a la hora de elaborarla.
¿Cómo mido la sal de mi paella?
Lo más fácil es que controles el nivel de sal conforme lo vayas preparando, ya que primero echas sal a la carne, luego a las verduras y, finalmente, al caldo.
Se debe ir midiendo y cuando se eche el agua, es decir, cuando hierva, puedes probar el caldo para comprobar si tu paella necesita más sal o no.
Arreglar una paella no solo es difícil, sino que, si hemos llegado al punto de echar el arroz, es imposible. Sin embargo, existen vídeos en Internet que te explican de manera detalla cuánta cantidad de sal necesita tu paella.
